sábado, 18 de julio de 2020

Cuento: " El ratón García "

Ricardo Mariño. Vení que leemos en 3º. Antología


Vení que leemos en 3º es una completa antología literaria que incluye actividades para trabajar la comprensión, la producción escrita, con distintos recursos para que los alumnos disfruten de la literatura.
Se presentan textos de autores prestigiosos y géneros diversos seleccionados por Ana Lucía Salgado.

PASOS DE AUTOR - VAMOS A CONOCER DISTINTAS OBRAS DE RICARDO MARIÑO Y ALGO MÁS.

Cuento: El ratón García
Cuento: El fantasma asustado
Cuento: Las aventuras de Tuco
Cuento: El peor nieto del mundo



Cuento: El ratón García


Aquella fue una temporada distinta, porque a los chicos se les cayeron más dientes que nunca. ¡Los ratones Pérez no daban abasto!

Una noche, por fin, los ratones decidieron que por primera vez emplearían a un ayudante ajeno a la familia. El elegido fue el primero que pasó: el joven ratón García.

Pero no hubo tiempo de enseñarle su tarea al ratón García. Solo le dieron una bolsita con monedas y las direcciones de los chicos a los que había que llevárselas.

Con el primer chico, el ratón García se equivocó de dirección. Buscó y buscó debajo de la almohada... nada. Nervioso, le abrió la boca para comprobar si le faltaba un diente. Para eso tuvo que pasar por sobre la nariz, ¡pero el chico se despertó y se puso a gritar! Llegó corriendo el padre, encendió la luz y atacó a zapatillazos al ratón García.

Con el segundo chico también le fue mal, porque debajo de la almohada encontró veinte dientes. Se quedó muy sorprendido, pero luego pensó que debía dejar allí todas sus monedas.

Cuando regresó al depósito de los ratones Pérez a buscar más monedas, el ratón tesorero se puso furioso:

—¡Ese chico pone dientes de plástico! —gritó—. ¡Siempre nos engaña!

En la tercera casa, García se metió en la habitación del abuelo y, al ver una dentadura postiza, exclamó:

—¡Se le salieron todos los dientes! —Le dejó todas las monedas y regresó.

El gerente Pérez lo expulsó sin contemplaciones. El ratón García se quedó muy triste. Salió a la calle y caminó hasta un caño que le pareció apropiado para meterse a dormir.

Pero en el caño había muchos ratones trabajando.

—¡Nefefitamos obreros! —le gritó uno, con la boca llena—. ¡Pagamos cien $Q por noche!

—¿Qué es $Q?

—¡Pesos queso!

—¿Y qué hay que hacer?

—¡Acafrrear queso!

El ratón García se unió entusiasmado a la fila de ratones obreros y empezó a trabajar. ¡Era el mejor empleo del mundo!

—¡Está buenífimo este trafafo! —dijo García entusiasmado, con un enorme queso en su boca.

© Ricardo Mariño
© Editorial Puerto de Palos S.A.
Ricardo Mariño -  Imagen cuento: Páginas 8 y 9 © Editorial Puerto de Palos S.A.

No hay comentarios: